ACTUALIZACIÓN URGENTE: Israel ha iniciado su anunciada invasión terrestre en las calles de Gaza, confirmaron fuentes militares, mientras los bombardeos contra edificios residenciales continúan sin tregua.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU en el territorio palestino ocupado ha reiterado su llamamiento a las fuerzas israelíes para que pongan fin a la “destrucción indiscriminada” de Gaza, advirtiendo que los ataques podrían estar dirigidos a provocar un cambio demográfico permanente, lo que equivaldría a una limpieza étnica.
La Organización Mundial de la Salud ha alertado que casi la mitad de los hospitales funcionales se concentran en Gaza, con el 36% de las camas hospitalarias y el 50% de las unidades de cuidados intensivos de toda la Franja. Esta situación crítica se agrava con cada bombardeo, poniendo en riesgo la vida de miles de personas.
En el hospital Al-Shifa, el médico de urgencias Ismail Ramadan ha denunciado la alarmante falta de camas y quirófanos, afirmando: “Nos vemos obligados a atender a los heridos en el suelo y a elegir entre salvar vidas, entre niños y ancianos.” La desesperación en el sector salud es palpable, mientras el número de heridos sigue aumentando a un ritmo alarmante.
Este conflicto, que ha escalado en las últimas semanas, está causando una crisis humanitaria sin precedentes, y la comunidad internacional observa con creciente preocupación. Las imágenes de la devastación en Gaza y el sufrimiento de sus habitantes están recorriendo el mundo, generando llamados a la paz y la intervención humanitaria.
Los próximos días serán cruciales, ya que la situación se desarrolla rápidamente y las consecuencias de esta invasión podrían ser devastadoras para la población civil. La comunidad internacional espera una respuesta efectiva que detenga la violencia y proteja a los civiles en la región.
Es imperativo que se tomen medidas inmediatas para frenar el conflicto y garantizar la seguridad de los ciudadanos en Gaza, así como de aquellos que se encuentran en la frontera, donde la tensión se siente en el aire. Las organizaciones humanitarias están en alerta, preparándose para brindar ayuda a quienes más lo necesitan.
La situación en Gaza es un recordatorio de la fragilidad de la paz en la región y de la urgente necesidad de encontrar soluciones duraderas que garanticen la protección de los derechos humanos y la dignidad de todas las personas.
