Nuevos reportes confirman que Israel ha rechazado de manera contundente las conclusiones de la Clasificación Integrada de las Fases de Seguridad Alimentaria (CIF), que afirmaba que la Franja de Gaza se encuentra en un estado de hambruna. Este rechazo se produce en medio de una creciente crisis humanitaria y ha generado un intenso debate internacional.
En un comunicado oficial, el Estado de Israel criticó severamente la falta de neutralidad y las graves fallas metodológicas en el informe de la CIF, alegando que la organización utilizó datos parciales y fuentes poco transparentes para llegar a sus conclusiones. Israel argumentó que el informe se basó en la información proporcionada por la organización terrorista Hamás, lo cual pone en duda su credibilidad.
Israel destacó que la CIF alteró sus propios criterios para facilitar la declaración de hambruna en Gaza. Según el comunicado, el umbral de 30% de la población afectada por inseguridad alimentaria fue reducido al 15% específicamente para este informe, lo que Israel considera un intento de manipulación.
El gobierno israelí aseguró que, a pesar de las dificultades, más de 100,000 camiones con ayuda humanitaria han entrado en Gaza desde el inicio del conflicto. Este flujo de asistencia ha provocado una fuerte caída en los precios de los alimentos en los mercados locales, lo que contradice las afirmaciones de hambruna.
“Israel se toma en serio los desafíos humanitarios en Gaza y, a pesar de las amenazas de seguridad, trabaja para permitir el paso continuo de ayuda civil”, indicó el gobierno israelí. La situación en la región sigue siendo crítica, con miles de palestinos desplazados y enfrentando severas dificultades para acceder a alimentos y recursos básicos.
El rechazo de Israel a las afirmaciones de la CIF se produce en un contexto donde la comunidad internacional está atenta a la situación humanitaria en Gaza. Las organizaciones humanitarias continúan trabajando en la zona, mientras el debate sobre la efectividad y la validez de los informes de la CIF se intensifica.
A medida que la crisis se desarrolla, los ojos del mundo permanecen fijos en Gaza, donde la realidad sobre la seguridad alimentaria y la situación de los civiles sigue siendo un tema de gran preocupación y controversia. Las próximas semanas serán cruciales para determinar el rumbo de la asistencia humanitaria y la respuesta internacional ante las alegaciones de hambruna.
