Junts impulsa reforma para permitir quema controlada de restos vegetales en el campo
Recién anunciado, el partido catalán Junts defenderá este martes en el Congreso de España una proposición no de ley para reformar la regulación sobre la quema de restos vegetales en zonas rurales y agrícolas. La propuesta busca eliminar la obligación de pedir permisos que actualmente impone la Ley de residuos y suelos contaminados de 2022, una medida que, según Junts, ha incrementado costos y riesgos para el sector agrario y forestal.
El debate se realizará en la Comisión de Agricultura y tiene un enfoque urgente para facilitar la gestión sostenible de residuos agrícolas mediante la quema “controlada y responsable” en los meses de bajo riesgo de incendios. Miriam Nogueras, representante de Junts, sostiene que esta reforma es clave para reducir cargas administrativas y económicas que afectan principalmente a pequeños agricultores y ayuntamientos rurales.
Prohibición actual y sus consecuencias
La ley vigente establece en su artículo 27.3 una prohibición general para quemar residuos vegetales en el entorno agrario, excepto en pequeñas explotaciones que cuentan con autorización previa de las comunidades autónomas por razones fitosanitarias o para prevención de incendios. Junts denuncia que esta medida ha generado un efecto contrario al esperado: la acumulación de biomasa sin gestionar que incrementa el peligro de incendios forestales.
La propuesta de Junts señala que la quema controlada, siempre que se realice con supervisión estricta y en condiciones meteorológicas favorables, contribuye a disminuir riesgos de incendios, mejorar la fertilidad de los suelos, controlar plagas y preservar la sustentabilidad económica en áreas rurales. Asimismo, enfatizan el impacto positivo sobre la economía campesina, al eliminar costos elevados y trámites burocráticos.
Contexto y próximos pasos
La discusión surge tras la reforma impulsada en 2022 por la exministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, que pretendía restringir la quema para fomentar una economía circular. Sin embargo, Junts argumenta que las restricciones fueron excesivas y no se ajustaron a la realidad del campo, perjudicando a miles de pequeños productores.
El partido independentista presentará su propuesta esta semana, y se espera que en el Congreso se abra un debate con implicaciones directas para las políticas ambientales y agrícolas de España. Se anticipa que la reforma no solo tenga impacto nacional, sino que también sirva como precedente para regiones con circunstancias rurales similares, como muchas zonas en México donde la gestión de residuos agrícolas enfrenta retos equivalentes.
Los agricultores y comunidades rurales estarán atentos a los próximos movimientos legislativos que podrían representar un cambio importante en la manera en que se maneja la biomasa agrícola y la prevención de incendios.
“La legislación actual impone cargas innecesarias y eleva riesgos de incendios, es urgente un marco normativo realista y equilibrado,” afirmó Miriam Nogueras.
En resumen, Junts busca con esta iniciativa facilitar la quema controlada de restos vegetales, reducir gastos, prevenir incendios y apoyar a los agricultores para que puedan mantener la viabilidad económica y ambiental de sus explotaciones.
