ACTUALIZACIÓN URGENTE: Koda, el emblemático perro K-9 del Departamento de Policía de Charlotte-Mecklenburg (CMPD), ha fallecido tras más de seis años de servicio, dedicándose a la protección de la comunidad. El 13 de agosto, el CMPD anunció su partida, recordando su valentía y habilidades excepcionales en la detección de explosivos y narcóticos.
Desde su incorporación en 2017, Koda fue fundamental en la lucha contra el crimen en Charlotte, participando en operaciones de alto riesgo y ayudando a rastrear sospechosos. Su olfato agudo y su dedicación lo convirtieron en un héroe local, cumpliendo su deber sin importar la hora ni las condiciones climáticas.
El CMPD destacó que cada misión representó un reto para Koda, quien demostró su valía en cada intervención. “Koda no era solo un perro policía, sino un verdadero miembro de la familia del CMPD”, afirmaron las autoridades en su emotivo mensaje de despedida.
La pérdida de Koda se siente profundamente, especialmente porque coincide con la partida de Cali, otro perro K-9 especializado en detección de drogas, que contribuyó a la incautación de más de 10 mil kilos de estupefacientes y 8 millones de dólares en efectivo. “Sabemos que ahora estás descansando junto a Cali. Descansa en paz Koda y gracias por todo tu servicio a nuestra comunidad… te extrañaremos mucho”, concluyó el CMPD.
Los perros K-9, como Koda, son entrenados para realizar tareas complejas que van más allá de la obediencia básica. Según la Asociación Canina Policial de Estados Unidos (USPCA), estos canes tienen habilidades que incluyen la detección de sustancias peligrosas, el rastreo de personas desaparecidas y la intervención en arrestos. Este entrenamiento especializado es crucial para su integración a los equipos policiales.
Las razas más comunes en unidades K-9 incluyen el pastor alemán, el pastor belga malinois, y el labrador retriever, entre otros. Estos perros pasan por un riguroso proceso de adiestramiento que puede durar meses y deben participar en prácticas regulares para mantener sus habilidades.
Los entrenadores K-9 son expertos en comportamiento canino y detección de olores, muchos de ellos trabajan en academias policiales o centros de formación certificados. La labor de Koda y su legado perdurará en la memoria de quienes lo conocieron y trabajaron a su lado, recordando siempre su valentía y compromiso con la seguridad de la comunidad.
Este es un recordatorio de la importancia de los animales de servicio en la lucha contra el crimen y el impacto que tienen en nuestras comunidades. Aunque Koda ya no esté con nosotros, su historia seguirá inspirando a muchos.
