Leonardo DiCaprio transforma la icónica escena de Rick Dalton en Once Upon a Time… in Hollywood
Nuevos detalles revelan que la legendaria escena en la que Rick Dalton sufre un colapso emocional dentro de su tráiler no estaba en el guion original de Once Upon a Time… in Hollywood. Según el libro “The Making of Quentin Tarantino’s Once Upon a Time… in Hollywood” de Jay Glennie y reportes de Rolling Stone, fue Leonardo DiCaprio quien propuso esta improvisación basada en su experiencia personal y en los temores más profundos de cualquier actor: el miedo a quedarse en blanco frente al equipo y los colegas.
Este giro radical en el personaje no solo añade profundidad emocional sino que también redefine por completo el destino de Rick Dalton. La escena, que se ha convertido en una de las más recordadas del filme, nace de la flexibilidad creativa del director Quentin Tarantino, quien inicialmente se mostró escéptico, pero finalmente aceptó explorar esta representación realista de la fragilidad actoral.
Del guion a la improvisación total: la negociación que cambió todo
DiCaprio argumentó a Tarantino que esta escena debía mostrar la desesperación del personaje y su vulnerabilidad ante sus mayores temores, incluyendo la presión de actuar frente a la joven actriz Julia Butters y la lucha contra su alcoholismo. A diferencia de una propuesta para ganar protagonismo, DiCaprio buscaba convertir un momento incómodo en una secuencia fundamental para el desarrollo del personaje.
Según Glennie, Tarantino esperaba que las escenas de la serie ficticia Lancer fueran un homenaje a los westerns de los años 70, por lo que convertir una secuencia en un desastre emocional era contrario a su concepto original. Sin embargo, tras varias discusiones y viendo la convicción de DiCaprio, decidió ceder y permitir que el actor trabajara con improvisación y emoción cruda.
Rodaje intenso y técnico para capturar autenticidad total
En el set, el director de fotografía Bob Richardson preparó la escena con una sola cámara para captar cada detalle de la actuación de DiCaprio, creando así una atmósfera íntima y centrada en el actor. Tarantino abandonó el guion rígido, facilitando a DiCaprio una lista de temas clave para que basara su improvisación: frustración por el alcohol, miedo al fracaso y la presión de ser observado.
La intensidad del rodaje fue al extremo, con DiCaprio abandonando su método habitual para entregarse a una improvisación prolongada y profunda, que según Brad Pitt, es una de las mejores actuaciones que ha presenciado en toda su carrera.
Edición caótica que refleja el desmoronamiento mental del personaje
El proceso de montaje no fue menos innovador. Quentin Tarantino junto con el editor Fred Raskin seleccionaron fragmentos de múltiples tomas, ensamblándolos con cortes abruptos para transmitir el caos mental de Dalton. Aunque existía una versión sin esta escena, la alternativa improvisada aportó una riqueza emocional que elevó la película a otro nivel, según el libro de Glennie.
Impacto inmediato y legado en la actuación contemporánea
La recepción crítica y del público confirmó la importancia de esta escena. Rolling Stone destaca que este momento es un punto de inflexión en la trayectoria de Rick Dalton y una demostración sobresaliente de la maestría actoral de DiCaprio. El propio actor ha descrito esta experiencia como una catarsis personal que le permitió enfrentar sus inseguridades y renovar la confianza en su personaje.
Así, la improvisación no solo cambió el destino del personaje, sino que dejó una huella imborrable en la historia de Once Upon a Time… in Hollywood y redefine el arte de la actuación en el cine contemporáneo.
