Más de 40 personas mueren y 27 desaparecen tras intensas lluvias en varios estados
Las fuertes lluvias que azotan México en las últimas horas han dejado un saldo devastador con al menos 41 muertos y 27 personas desaparecidas, informó el Gobierno en un comunicado oficial. La emergencia se concentra en los estados de Querétaro, Veracruz, Puebla, Hidalgo y San Luis Potosí, donde las precipitaciones provocaron inundaciones y deslaves.
Las inundaciones dañaron miles de viviendas y carreteras, mientras que cortes masivos de electricidad han dejado a comunidades enteras sin servicio eléctrico. El impacto ha obligado a cientos de familias a abandonar sus hogares urgentemente para resguardar sus vidas.
Reunión urgente entre gobernadores y la presidencia
Ante la gravedad de la situación, Claudia Sheinbaum, presidenta, se reunió con los gobernadores de las entidades afectadas para actualizar las afectaciones y revisar las necesidades prioritarias en cada municipio. Este encuentro busca coordinar respuestas rápidas y efectivas ante el desastre que sigue desarrollándose.
Los deslaves y el colapso de infraestructura afectan directamente la movilidad y el abastecimiento en las zonas más golpeadas. El Gobierno federal y local trabajan en el despliegue de ayuda humanitaria y en las labores de búsqueda para localizar a los desaparecidos.
Impacto y próximos pasos en la emergencia
Las cifras de víctimas y desaparecidos podrían aumentar conforme continúe la evaluación de daños y los recorridos de verificación en las zonas afectadas. Autoridades mantienen la alerta para nuevas lluvias que podrían complicar aún más la situación.
La población en riesgo debe seguir las indicaciones oficiales y estar atenta a los reportes gubernamentales, mientras equipos de protección civil y fuerzas del orden continúan con las evacuaciones y rescates. La solidaridad ciudadana también juega un papel fundamental en esta crisis.
Las lluvias de esta magnitud se presentan como un llamado urgente a reforzar la infraestructura y estrategias para enfrentar fenómenos climáticos extremos en México, un país vulnerable a las tormentas e inundaciones.
Situación humanitaria y asistencia inmediata
Se han habilitado albergues en los estados afectados para proporcionar refugio, alimentos y atención médica a los desplazados. El Gobierno llama a la calma y trabaja para restablecer servicios y garantizar la seguridad de los damnificados.
Esta emergencia climática muestra la importancia de contar con sistemas de alerta temprana y planes de contingencia que permitan reducir la pérdida de vidas humanas y resguardar el patrimonio de las familias mexicanas.
Los próximos días serán decisivos para contener los daños y apoyar a las comunidades más afectadas por las lluvias que siguen azotando el centro y sureste del país.