ACTUALIZACIÓN: Nuevos reportes confirman que integrar estiramientos nocturnos en la rutina antes de dormir puede transformar la calidad del sueño y mejorar el bienestar físico y mental.
Según especialistas, dedicar unos minutos a estas prácticas antes de acostarse ayuda a liberar tensiones acumuladas por el estrés diario y el sedentarismo, facilitando así una transición más efectiva hacia el descanso. Kat Pasle-Green, entrenadora personal, explicó a CBS News que estos estiramientos son clave para relajar tanto el cuerpo como la mente.
Los beneficios de estirarse antes de dormir son múltiples; no solo aumentan la flexibilidad y mejoran la salud muscular, sino que también permiten sincronizar cuerpo y mente, lo que puede ser especialmente útil para quienes padecen insomnio crónico. Tim Kelleher, instructor de yoga, destacó que muchas personas llegan a la noche con la mente acelerada y el cuerpo agotado, pero sin lograr que ambos estados se alineen para facilitar el sueño.
“La mente está a mil por hora, el cuerpo está cansado, pero ambas cosas no parecen comunicarse lo suficientemente bien como para relajarse y dormir”, afirmó Kelleher. Por eso, los expertos recomiendan buscar esa sintonía entre cuerpo y mente antes de ir a la cama, especialmente en casos de estrés.
Los especialistas coinciden en la importancia de desconectarse de dispositivos electrónicos antes de iniciar la rutina de estiramientos, ya que esto favorece la relajación y prepara el terreno para un descanso más profundo.
6 ejercicios de estiramiento nocturno para un sueño reparador
Los expertos han propuesto seis ejercicios de estiramiento que pueden facilitar el sueño:
- Flexión hacia adelante: Desde pie o sentado, inclínate desde las caderas para estirar. Kelleher sugiere acompañar con respiraciones profundas.
- Cruce de tobillos sentado: Coloca un tobillo sobre la pierna opuesta, inclinándote hacia adelante. Mantén la posición durante tres respiraciones antes de cambiar de lado.
- Apertura de pecho: Siéntate con la espalda recta y coloca las manos detrás del cuerpo. Relaja la cabeza hacia atrás y abre el pecho, manteniendo la postura durante tres respiraciones.
- Estiramiento lateral: Sentado, desliza una mano hacia el costado mientras inclinas el torso hacia ese lado. Repite en ambos lados, respirando profundamente.
- Estiramiento de abrazo: Envuelve los brazos alrededor de la caja torácica y baja la barbilla hacia el pecho al inhalar y exhalar, alternando el brazo que queda arriba en cada repetición.
- Postura de torsión: Acostado boca arriba, abraza las rodillas hacia el pecho y deja caer las piernas hacia un lado para una ligera torsión en la columna.
Si bien estos ejercicios pueden realizarse en cualquier momento, su eficacia se potencia durante la transición de un estado activo a uno de reposo. Relajar intencionalmente el cuerpo y la mente justo antes de dormir permite obtener un mayor retorno del tiempo invertido, mejorando notablemente la calidad del descanso.
Antes de comenzar con cualquier rutina de estiramientos, los expertos sugieren dejar de lado el teléfono móvil para favorecer la desconexión y preparar la mente para el descanso.
