Ciudad de México. – México y Canadá blindan su alianza estratégica justo antes de la revisión del TMEC en 2026, con la amenaza latente del regreso de Donald Trump y la creciente operación de cárteles mexicanos en territorio canadiense.
La visita del primer ministro canadiense, Mark Carney, a Palacio Nacional esta semana, marcó un punto de inflexión en la relación bilateral. En conferencia conjunta con la jefa de gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, revelaron que la cooperación ya no será solo económica, sino que entran con fuerza temas de seguridad y confianza mutua.
La inestabilidad y las políticas proteccionistas que podría implementar el gobierno de Trump al regresar a la Casa Blanca han impulsado a ambos países a preparar un plan de contingencia binacional. Este incluye coordinación estrecha en comercio, inversiones, así como en normas laborales y ambientales más estrictas y armonizadas.
Reconocimiento inédito de cárteles mexicanos en Canadá obliga a acelerar cooperación
Un hecho sin precedentes fue la mención explícita de Mark Carney sobre la presencia de cárteles mexicanos en Canadá. Hasta ahora, este tema había sido silenciado o tratado muy discretamente. Este reconocimiento público eleva la urgencia de trabajar coordinadamente en inteligencia, combate al tráfico de drogas y evitar que el crimen transnacional sirva como pretexto para imponer medidas más duras en la frontera con Estados Unidos.
La cooperación en seguridad, antes simbólica o limitada a declaraciones diplomáticas, ahora se convierte en acción decidida. La amenaza del crimen organizado se suma a tensiones comerciales y migratorias que complican la agenda trilateral norteamericana.
Mundial 2026, la vitrina política para la nueva era Trump II
El Mundial de Futbol 2026, coorganizado por México, Canadá y Estados Unidos, será la primera ventana pública que mostrará la fortaleza del bloque tras la llegada de Trump al poder por segunda vez. No solo se trata de fútbol: el evento servirá para exhibir la cooperación política, deportiva y cultural que impulsa la confianza y unidad en la región.
Como símbolo de esta alianza, Sheinbaum entregó a Carney un huipil y un alebrije de jaguar, mientras que el primer ministro canadiense obsequió un rompevientos de su selección y un balón oficial del torneo.
Ampliar el TMEC para integrar nuevas agendas y competir globalmente
Ambos mandatarios coincidieron en que la revisión del TMEC debe ir más allá de la protección de sectores sensibles. Proponen extender los acuerdos a educación, ciencia, tecnología y energías limpias. Esta ampliación busca fortalecer la competitividad de América del Norte frente a regiones como Asia y Europa, manteniendo a la región como la más competitiva del mundo.
“América del Norte es la región más competitiva del mundo y debemos mantenerlo así”, subrayaron Sheinbaum y Carney, enfatizando que este blindaje económico debe ir acompañado de reglas claras, inversiones conjuntas y estándares laborales y ambientales compartidos.
¿Qué sigue?
La coordinación entre México y Canadá se intensificará en los próximos meses con miras a las negociaciones del TMEC. Además, la cooperación en seguridad promete acciones concretas para desmantelar redes del crimen organizado que operan en ambos países.
El Mundial 2026 se convierte en una fecha clave para evidenciar este fortalecimiento trilateral frente a la imprevisibilidad de Washington y la creciente inseguridad transnacional.
Los mexicanos deben estar atentos a estas negociaciones y colaboraciones porque marcarán no solo el futuro del comercio sino también la seguridad y estabilidad regional en tiempos complejos.
