La bancada de Morena en la Cámara de Diputados acelera la comprobación de sus gastos tras una auditoría reciente del Órgano Interno de Control en San Lázaro. Según informó el coordinador administrativo morenista, Faruk Miguel, 93 de los 126 diputados que estaban pendientes ya enviaron la evidencia de sus ubicaciones físicas o virtuales.
Este avance se reporta como urgente dada la auditoría que inició apenas la semana pasada y que obliga a los legisladores a demostrar el uso correcto de recursos públicos asignados para atención ciudadana y apoyo legislativo, que ascienden a más de $75,000 pesos mensuales por cada diputado.
Comprobación parcial pero avance notable
De ese monto total, $28,772 pesos han sido comprobados con facturas y folios fiscales, mientras que $45,786 pesos se documentaron mediante oficios firmados mediante “bajo protesta de decir verdad” sin la presentación de comprobantes fiscales.
Faruk Miguel explicó que los gastos de atención ciudadana exigen comprobantes fiscales obligatorios, pero los recursos asignados para apoyo legislativo sólo requieren un informe y evidencias, sin necesidad de factura, según los lineamientos internos.
“Ese recurso no es un recurso a comprobar de manera fiscal, sino es un apoyo legislativo a las actividades del legislador”, detalló el coordinador administrativo.
Implicaciones inmediatas y contexto
Este proceso cobra relevancia porque el retraso en la comprobación incompleta de gastos había dejado a 126 diputados morenistas en falta hasta el pasado 1 de octubre. Ahora, con 93 legisladores ya cumpliendo, la bancada busca resolver todas las observaciones antes de que la auditoría se profundice o derive en sanciones.
El manejo transparente y rápido de estos recursos es fundamental para restaurar la confianza pública, especialmente cuando el Congreso está bajo la lupa por el uso de fondos públicos durante la presente legislatura.
Qué sigue
En las próximas semanas, el Órgano Interno de Control revisará la documentación presentada y podrá exigir aclaraciones o nuevas comprobaciones para los diputados todavía pendientes. Morena asegura estar comprometido en cumplir al 100% con las reglas establecidas, buscando evitar crisis mayores dentro de su grupo parlamentario.
Este proceso será clave para definir la integridad fiscal de la bancada más grande en San Lázaro y marcará un precedente para futuras auditorías sobre el manejo de recursos legislativos en México.
