Nuevas reglas estrictas para dueños de palcos en estadio Banorte han sido reveladas y notificados este 26 de septiembre de 2025, en plena cuenta regresiva para el Mundial de 2026 que tendrá lugar en México. Esta actualización normativa impacta directamente a los titulares y usuarios temporales de los palcos y plateas del estadio, quienes deben ajustarse a lineamientos de acceso durante los partidos y eventos posteriores al próximo verano.
Prohibición total de ingresar alimentos y bebidas
El reglamento es de observancia obligatoria, y su punto más polémico es la prohibición absoluta para ingresar alimentos y bebidas al estadio Banorte. Según el Artículo 8, inciso O, queda “estrictamente prohibido al Titular, Invitado o Tercero Usuario Temporal, ingresar Alimentos y Bebidas”, lo que marca un giro importante frente a reglas pasadas que permitían esta práctica.
Este cambio provoca controversia entre la comunidad de palcohabientes, quienes deberán ahora acudir exclusivamente a las opciones suministradas por la FIFA. La organización será la encargada de proveer los paquetes de alimentos y bebidas, con costos que van desde 320 dólares (aproximadamente 5,800 pesos) hasta 15 mil dólares (cerca de 275,000 pesos mexicanos), generando un aumento considerable en el gasto para los asistentes más exclusivos.
Consecuencias y restricciones severas para incumplidos
El reglamento también estipula sanciones a quienes no respeten esta norma. De acuerdo con el Artículo 28, el ingreso por cuenta propia de alimentos y bebidas será considerado una “Falta no grave”, pero que puede derivar en acciones firmes por parte de las autoridades del estadio.
Además, los dueños de palcos no podrán realizar modificaciones o remodelaciones sin la autorización expresa y la ejecución exclusiva por parte del ente organizador, el FDF. Solo en casos excepcionales, con costos a cargo del titular, se podrá solicitar y aprobar alguna mejora, limitando aún más la autonomía sobre estos espacios.
Impacto inmediato y reacción en el sector
Estas medidas llegan en plena fase de preparativos para el Mundial 2026, que se espera sea uno de los eventos deportivos más relevantes en la historia de México. El anuncio provoca preocupación entre dueños de palcos, quienes enfrentan ahora regulaciones más estrictas y costos elevados para mantener sus privilegios durante el torneo.
En el entorno mexicano, el estadio Banorte es un punto clave, y estas restricciones marcan un precedente en la organización y operación de eventos internacionales, evidenciando la influencia y control que FIFA ejercerá sobre instalaciones y servicios asociados.
Qué sigue y a qué estar atentos
Con el Mundial aproximándose, la vigilancia y cumplimiento de estas nuevas reglas será estricta. Los titulares y terceros usuarios deben prepararse para adaptar sus planes y presenciar un cambio sustancial en la experiencia dentro del estadio Banorte.
Se espera que en los próximos meses se den a conocer detalles sobre los paquetes y servicios que la FIFA ofrecerá en alimentos y bebidas, así como confirmaciones sobre autorizaciones limitadas para mejoras en los palcos bajo supervisión oficial.
Este nuevo reglamento, confirmado por fuentes como El Universal y ESPN, representa una regulación sin precedentes que redefinirá la exclusividad y uso de espacios VIP en eventos deportivos de alta envergadura en México.
