Nuevo caso de gusano barrenador en Nuevo León pone en riesgo reapertura de frontera
Un nuevo caso de gusano barrenador del ganado (GBG) fue confirmado en Sabinas Hidalgo, Nuevo León, a escasos 100 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, complicando así los planes de reapertura para la exportación de ganado hacia ese país, anunciaron autoridades y líderes del sector agropecuario.
El Consejo Nacional Agropecuario (CNA), a través de su director Luis Fernando Haro, destacó que esta detección representa un retroceso importante tras los avances logrados para erradicar la plaga que afecta principalmente al sur sureste del país. Haro informó en entrevista que el ganado afectado, un animal de apenas ocho meses con una herida donde se coloca el arete, provenía de una movilización certificada del sur del país y fue sometido a todos los controles establecidos.
“Este no es un ganado que cruzó ilegalmente la frontera, sino parte de una engorda certificada del sur del país, lamentablemente no se detectó la infección a tiempo,” señaló Haro.
Destacó que la erradicación total del gusano barrenador tomará tiempo, ya que las plantas para la producción de moscas estériles que serán clave para contener la infestación aún no estarán listas este año. Estas infraestructuras se construyen en Chiapas y Texas, y se espera que la erradicación pueda lograrse en el próximo año, aunque Haro recordó que la última campaña duró más de una década.
Sader asegura que no hay riesgo de dispersión en Nuevo León
Por su parte, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) descartó cualquier riesgo inmediato de que el gusano barrenador se disperse en la zona norte del país. En comunicado oficial, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) informó que el caso fue detectado a tiempo y que las larvas se encontraban en una fase temprana, lo que reduce al mínimo la posibilidad de aparición de moscas y de un brote en la zona.
Senasica, junto con la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA), el gobierno estatal y el Comité de Protección Pecuaria de Nuevo León, revisaron minuciosamente un cargamento de 100 animales provenientes de Minatitlán, Veracruz. Solo un ejemplar presentó la infestación, fue tratado y curado, y todo el ganado recibió ivermectina para evitar riesgos mayores.
El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, informó que la comunicación con las autoridades estadounidenses ha sido inmediata. Señaló que la responsable del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, fue notificada para mantener transparencia en las acciones y protocolos.
Reapertura de frontera sigue en manos de EU, piden decisión basada en evidencia
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó que se han tomado todas las medidas necesarias para contener la plaga y resaltó que técnicos estadounidenses ya visitaron México para evaluar las acciones implementadas.
“La decisión de abrir o cerrar la frontera no debe ser discrecional, sino basada en indicadores técnicos y evidencias, como acordamos con EU,” dijo Sheinbaum.
Actualmente, se espera el dictamen oficial de Estados Unidos que podría definir si se reabre la frontera para la exportación de ganado. Mientras tanto, México mantiene estrictos protocolos sanitarios y vigilancia intensiva para contener el gusano barrenador, consciente del impacto económico y sanitario de esta plaga.
Impacto y próximos pasos
Este hallazgo impacta directamente a un sector clave de la economía mexicana, pues la frontera con Estados Unidos permanece cerrada desde noviembre. Las exportaciones de ganado representan una fuente importante de ingresos para productores nacionales, sobre todo en estados distribuidos entre Chiapas y la frontera norte.
Las autoridades continúan reforzando las medidas de control sanitario y trabajarán con tecnología avanzada una vez que estén operativas las plantas productoras de moscas estériles, pilares en la estrategia para erradicar el GBG en el país.
En este momento, productores, autoridades sanitarias y gobierno federal están en máxima alerta por la evolución de este caso detectado en Nuevo León y por las posibles decisiones que tome Estados Unidos, las cuales definirán el futuro inmediato del comercio ganadero en la región.
