Últimos reportes confirman que la muerte del activista conservador Charlie Kirk ha provocado una ola de despidos y sanciones en Estados Unidos por comentarios considerados inapropiados en redes sociales. Kirk, quien fue asesinado el miércoles de un disparo en el cuello durante un debate en la Universidad Utah Valley, estaba estrechamente relacionado con el expresidente Donald Trump y su campaña Make America Great Again.
El Departamento de Defensa anunció que tomará acciones disciplinarias contra miembros de las fuerzas armadas que hayan hecho publicaciones negativas sobre el asesinato, siguiendo una orden del secretario de Defensa, Pete Hegseth. Aunque no se ha revelado un número exacto, varios militares ya han sido despedidos. Algunos oficiales critican esta medida, considerándola excesiva en un contexto ajeno a la cadena de mando.
Kirk, de 31 años, fue asesinado por Tyler Robinson, un joven de 22 años que disparó desde un tejado cercano. Su muerte ha desatado un intenso debate sobre la libertad de expresión en EE. UU., resaltando las tensiones políticas y sociales que rodean su figura.
Los despidos se han extendido a diversos sectores. Un agente del Servicio Secreto, encargado de la protección del presidente, perdió su empleo tras publicar que Kirk “esparció odio y racismo” y que “el karma es inevitable”. Además, el analista político Matthew Dowd fue despedido de MSNBC por insinuar que el asesinato estaba vinculado a las palabras polarizadoras de Kirk.
En el ámbito cultural, la editorial DC Comics canceló la serie Red Hood después de que su autora, Gretchen Felker Martin, publicara un comentario altamente controversial tras el asesinato. En Nueva Orleans, una bombera enfrenta una investigación por un comentario en el que describió la bala que mató a Kirk como “un regalo de Dios”.
El deporte no se queda atrás, ya que los Carolina Panthers y la aerolínea Delta han suspendido a empleados por comentarios en redes sociales relacionados con la muerte de Kirk. En el ámbito educativo, un maestro del condado de Clay, Florida fue suspendido tras referirse a comentarios previos de Kirk sobre que “algunas muertes de fuego cada año” eran un precio aceptable para mantener el derecho a portar armas.
El Departamento de Estado también advirtió que podría revocar visas a extranjeros que glorifiquen o se burlen del asesinato de Kirk. El subsecretario Christopher Landau solicitó la colaboración de los ciudadanos para reportar tales mensajes, lo que podría llevar a la cancelación de visados.
La situación sigue desarrollándose y se espera que haya más repercusiones en los próximos días. Las tensiones en torno a la libertad de expresión y las reacciones a la muerte de Kirk continúan generando un amplio debate en la sociedad estadounidense.