Nuevos reportes confirman que los padres de familia están demandando medidas de seguridad más estrictas en escuelas privadas de Puebla tras el feminicidio de Natalia Andrade, ocurrido recientemente. En una declaración impactante, Jorge González y González, presidente de la Asociación de Padres de Familia de Colegios Particulares, destacó la necesidad urgente de reforzar los filtros de inscripción y la formación en valores dentro de las instituciones educativas.
En entrevista con 24 HORAS, González y González reveló que tras dos semanas del inicio del ciclo escolar 2025-2026, se han llevado a cabo reuniones con padres que expresan su preocupación por la seguridad de sus hijos, especialmente después de que un estudiante de secundaria, identificado como Alex N., fue presuntamente implicado en el crimen de Natalia. “Este tema ha sido alarmante para los padres de familia, no por un asunto de escándalo, sino porque refleja que tanto ellos como los maestros debemos trabajar en reforzar valores”, afirmó.
El llamado a la acción se intensificó después de una protesta ocurrida el 1o de septiembre, el primer día de clases, donde padres del Instituto D’Amicis se manifestaron contra la inscripción del menor involucrado, lo que finalmente resultó en su expulsión. “Entre las propuestas de algunos padres está reforzar los filtros durante las entrevistas con las familias para conocer mejor su contexto. Esto podría aportar seguridad, aunque también implica riesgos de vulnerar ciertos derechos”, comentó González.
En los próximos días, el presidente de la asociación se reunirá con autoridades gubernamentales para diseñar un protocolo que garantice la seguridad de todos los alumnos de colegios privados, evitando la revictimización de menores y protegiendo sus derechos. Este desarrollo es crucial ya que las familias buscan un entorno educativo seguro para sus hijos, y la situación actual ha generado un clima de incertidumbre y preocupación en la comunidad escolar.
La integración de estas medidas es vital no solo para prevenir incidentes futuros, sino también para fomentar un ambiente educativo saludable y seguro. Las autoridades y padres de familia deben trabajar juntos en la implementación de estas estrategias, asegurando que todos los estudiantes puedan asistir a la escuela sin temor.
Este caso resalta la importancia de abordar la seguridad escolar de manera integral, garantizando el derecho a la educación mientras se protegen a los alumnos. La comunidad educativa está atenta a los próximos pasos que se tomarán para mejorar la seguridad en las escuelas privadas.
































































