PAN denuncia asesinato de Carlos Manzo y critica Plan Michoacán de Sheinbaum
Federico Döring, legislador del Partido Acción Nacional (PAN), lanzó una dura crítica contra el gobierno federal y estatal tras el asesinato del líder social Carlos Manzo. En un mensaje contundente denunció que “a Carlos Manzo lo mataron los narcos, lo dejaron solo las autoridades de Morena”, evidenciando el abandono ante la escalada de violencia en Michoacán.
El senador también expresó fuertes dudas sobre la efectividad del Plan Michoacán por la Paz, presentado recientemente por la presidenta Claudia Sheinbaum para atender la crisis de seguridad en esa entidad. Döring alertó que este plan “no es viable” y subrayó que el principal obstáculo reside directamente en la administración estatal encabezada por el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.
El gobernador, “piedra en el zapato” del plan de seguridad
El legislador panista calificó a Ramírez Bedolla como “la piedra en el zapato” para alcanzar la paz en Michoacán. Advirtió que si la presidenta Sheinbaum no ha aprendido la “lección de Sinaloa” y continua apoyando un gobierno estatal que “está podrido y vinculado a la delincuencia organizada”, el plan federal para controlar la violencia está condenado al fracaso.
Respecto a la iniciativa del PRI para exigir la renuncia del gobernador, Döring la descartó como “no viable”, explicando que solamente el Senado tiene la facultad legal para proceder con la desaparición de Poderes en la entidad. Sin embargo, insistió en que “el éxito del Plan Michoacán depende de ponerlo en manos de alguien que pueda conciliar la gobernabilidad y la paz” y hoy esa condición no se cumple.
Critican abandono y exigen acción efectiva contra narcotráfico
La crítica del PAN pone en evidencia el creciente descontento con la estrategia de Morena frente a la crisis de seguridad en Michoacán, que recientemente cobró la vida del activista Carlos Manzo, un hombre que denunciaba abiertamente a los grupos criminales. Su asesinato refleja la incapacidad de las autoridades para proteger a líderes sociales clave y frenar la influencia del crimen organizado.
Hasta ahora, el Plan Michoacán por la Paz enfrenta incertidumbre sobre su capacidad de impacto real, pues la falta de apoyo y confianza en el gobierno estatal obstaculiza su aplicación práctica. Döring urgió a la presidenta Sheinbaum a considerar un perfil más eficaz para liderar este esfuerzo y evitar que el conflicto armado y la violencia continúen escalando en la región.
Lo que sigue
Las autoridades federales y el Senado se mantendrán en el centro del debate para definir el rumbo del plan y la continuidad del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, mientras la violencia en Michoacán sigue al alza y la sociedad exige resultados concretos. Carlos Manzo se convierte en símbolo del costo humano del conflicto y del abandono institucional que sufren las víctimas y defensores de la justicia.
Continúa la atención nacional sobre Michoacán y la respuesta del gobierno de Morena que, según el PAN, enfrenta el desafío más grave de seguridad en años, con la exigencia pública de que se asuman responsabilidades y se implementen medidas urgentes para proteger a la población y restablecer la paz.
Federico Döring: “A Carlos Manzo lo mataron los narcos y lo dejaron solo las autoridades de Morena, el Plan Michoacán no llegará a ningún lado si está en manos de un gobernador vinculado al crimen”































































