Una pantalla lateral estuvo a punto de caer sobre la banda El Tri durante su concierto sinfónico en el Auditorio Nacional, obligando a una pausa de más de 30 minutos en el espectáculo que se realizaba esta tarde.
El incidente ocurrió justo al inicio del concierto, cuando El Tri comenzó con el tema clásico “Perro negro y callejero”. Alejandro Lora, líder de la agrupación, detuvo el show inmediatamente al notar que una pantalla colgante se estaba viniendo abajo amenazando a los músicos. “Nunca pasan estas mamadas, solo cuando toca El Tri”, dijo Lora entre risas, generando la espontánea reacción del público presente.
Los músicos tuvieron que retirarse a camerinos mientras el equipo de producción trabajaba rápido para asegurar y levantar la pantalla. La pausa se prolongó por aproximadamente 40 minutos, tiempo en el que el público manifestó su molestia con gritos y burlas dirigidas a la organización. “¡Cul3ros, cul3ros, cul3ros!”, se escuchó desde las gradas y Lora respondió con buen humor: “Sí, a huevo, desahóguense”.
Al recomenzar el show, la banda retomó la canción desde donde se interrumpió y añadió que, al estar grabando la presentación, harían como que nada había pasado para mantener la energía del concierto.
Celebración y emotividad en el Auditorio Nacional con más de 10 mil asistentes
El Auditorio Nacional estaba lleno con cerca de 10 mil personas que celebraban los 57 años de trayectoria de El Tri. El ambiente se encendió cuando Alejandro Lora, con la bandera mexicana en mano, invitó a todos a corear el Himno Nacional Mexicano, en un momento que recordó el tradicional Grito de Independencia, aunque fuera en un mes diferente, porque con Lora el patriotismo se vive todo el año.
La segunda parte del concierto incluyó la participación especial de la Sinfónica Esperanza Azteca, dirigida por el maestro Saldaña, quien acompañó a El Tri para interpretar piezas emblemáticas como “San Juanico” y el esperado “Simplemente Sinfónico”.
Este proyecto sinfónico, que marca un hito para la banda, combinado con el clásico rocanrol que distingue a El Tri, conectó de forma poderosa con su público. Lora volvió a preguntarle a la audiencia: “¿Estamos siendo felices?” y celebró la pasión por el rock mexicano, invitando a todos a cantar éxitos como “Vicioso” y “Juanita” junto a una orquesta de más de 50 músicos.
Emotivo homenaje y cierre con el clásico ‘Triste canción de amor’
El concierto tuvo su momento más emotivo al dedicar el himno “Triste canción de amor” a todas las mujeres rocanroleras presentes, en un ambiente que incluyó imágenes románticas de Chela y Alejandro Lora entre flores y tiernos gestos.
Fiel a su estilo frontal, Alejandro Lora permitió que sus seguidores expresaran molestia con algunas mentadas de madre que él tomó como muestras de cariño, demostrando que la conexión con su público es auténtica y a prueba de cualquier contratiempo.
Después del susto inicial, la fiesta de rocanrol continuó hasta el final con la misma intensidad y energía en un Auditorio Nacional que vibró con la historia viva de El Tri, que este lunes repetirá la misma función registrándose así otro capítulo en la leyenda de esta icónica banda mexicana.
“Nunca pasan estas mamadas, solo cuando toca El Tri” – Alejandro Lora
El Tri y su concierto sinfónico en el Auditorio Nacional mantienen viva la esencia y la pasión por el rock mexicano con momentos tanto inesperados como emotivos, ahora con el sello de la resiliencia sobre el escenario.