La creciente presencia de avispas asiáticas en Europa ha llevado al Reino Unido a implementar un enfoque innovador para su control. Este método, que incluye el uso de microtransmisores, promete ser una solución más efectiva frente a la amenaza que representa la Vespa velutina, conocida por su impacto negativo en la biodiversidad y el sector apícola.
La Vespa velutina no es una amenaza seria para los humanos, pero su capacidad depredadora ha ocasionado la disminución de colmenas, lo que pone en riesgo la polinización de cultivos y la estabilidad de los ecosistemas. Hasta ahora, las estrategias tradicionales como trampas estacionales y destrucción de hábitats han resultado ineficaces y costosas.
La Animal and Plant Health Agency (APHA) ha comenzado a probar un sistema de seguimiento que utiliza microdispositivos de solo 160 miligramos, diseñados para no afectar el vuelo de las avispas. Estos dispositivos, una vez adheridos a un insecto, pueden transmitir señales GPS, lo que permite localizar sus nidos en un área de aproximadamente un kilómetro.
El proceso de instalación del transmisor es rápido. Los expertos colocan cebos y, al confirmar que un ejemplar regresa al mismo lugar, fijan el transmisor en cuestión de segundos. Posteriormente, el trayecto del insecto se monitoriza a través de receptores portátiles, drones o aplicaciones móviles que triangulan la señal emitida.
Además de ser ligeros, los transmisores cuentan con baterías recargables y son reutilizables, lo que los hace una opción sostenible frente a las técnicas tradicionales. La tecnología también incluye indicadores LED y alertas sonoras que guían a los equipos hacia los nidos.
El proyecto se beneficia de la colaboración ciudadana mediante la aplicación Asian Hornet Watch, que permite a los ciudadanos enviar informes y fotografías de avistamientos. En el último año, se registraron más de 30,000 notificaciones, un volumen de datos que ha sido esencial para dirigir las labores de los especialistas.
Según la APHA, los ensayos iniciales han demostrado la efectividad de este sistema, lo que ha llevado al despliegue de cuatro equipos en diferentes zonas del Reino Unido. La combinación de tecnología avanzada y participación ciudadana representa un avance significativo en la lucha contra la expansión de la avispa asiática y la protección de la biodiversidad en Europa.