Carlos Slim da un paso decisivo para fortalecer su apuesta en el sector energético nacional tras cerrar un contrato histórico con Pemex para perforar hasta 32 pozos en el campo Ixachi, Veracruz. La operación, recién anunciada por Grupo Carso en un comunicado oficial a la Bolsa Mexicana de Valores, representa una inversión potencial de 1,991 millones de dólares que impulsa la producción petrolera en uno de los yacimientos terrestres más valiosos de México.
El acuerdo entre ambas empresas contempla un plan agresivo que buscará aumentar significativamente la extracción de crudo y gas en Ixachi durante los próximos tres años, un campo que actualmente produce alrededor de 93,000 barriles diarios de petróleo y 715 millones de pies cúbicos de gas. Según el contrato, los pagos a Carso comenzarán hasta enero de 2027, cuando se espera que al menos 12 pozos ya estén en producción.
Un negocio estratégico con impacto inmediato
Esta fórmula financiera permite a Pemex ampliar su capacidad productiva sin comprometer su liquidez en el corto plazo, pues pagará en 21 mensualidades por cada pozo entregado, utilizando los recursos generados por la comercialización directa de los hidrocarburos extraídos. Esta estructura refleja el giro estratégico de Pemex para enfrentar su elevado endeudamiento, que supera los 98,000 millones de dólares, y atender sus obligaciones con proveedores por unos 20,000 millones de dólares.
Para Slim, este acuerdo representa una consolidación de su influencia en el sector energético mexicano, un terreno en el que su conglomerado suma más de 18 años de experiencia en perforación terrestre y marina. A través de sus filiales GSM Bronco y MX DLTA NRG 1, Carso opera actualmente con 19 equipos terrestres y 3 unidades marinas de última generación que serán clave para ejecutar este ambicioso proyecto.
Ixachi, la joya energética en Veracruz
El campo Ixachi, ubicado en Veracruz, es considerado por expertos una de las reservas más prometedoras del país, con importantes cantidades de gas húmedo y condensados. Hasta ahora, se han perforado 28 pozos con una profundidad promedio de 7,650 metros, donde Carso ya ha tenido un rol activo.
El contrato se da en un momento crucial, con el gobierno de Claudia Sheinbaum impulsando un plan estratégicode 10 años para aumentar la producción nacional de hidrocarburos mediante esquemas que incluyan al sector privado, denominados esquemas mixtos. En este contexto, el empresario se convierte en un socio indispensable para Pemex, no solo por su capacidad financiera, sino por su infraestructura industrial y experiencia técnica.
El futuro energético de México
Este proyecto posiciona a Slim como un actor clave en el tablero energético nacional para enfrentar la caída persistente en la producción petrolera y garantizar el suministro necesario para el país. El avance en Ixachi será un indicador crucial para medir el éxito de esta nueva estrategia.
Lo que sigue ahora es la movilización inmediata para iniciar la perforación de los pozos en el terreno veracruzano, con la vista puesta en la primera entrega de pozos en enero de 2027. Este movimiento de Grupo Carso marca un nuevo capítulo en la relación entre capital privado y Pemex, y es probable que opere como un detonador para futuros acuerdos en el sector.
En definitiva, el contrato de más de 1,900 millones de dólares para perforar en Ixachi no solo representa un negocio lucrativo para Slim, sino que también puede ser un punto de inflexión para la recuperación de la industria petrolera mexicana.
