Family Cash reabre en Lugo tras cierre temporal por plaga de roedores
Family Cash ha reabierto recientemente su supermercado en Lugo tras ser clausurado más de tres días por la Xunta de Galicia debido a una grave infestación de roedores detectada por inspectores sanitarios el pasado 14 de octubre de 2025. Este cierre temporal impactó múltiples áreas del establecimiento, incluyendo la cafetería, carnicería y pescadería.
Una inspección oficial descubrió excrementos y presencia viva de roedores en áreas clave del hipermercado, además de heces de aves y numerosos agujeros en las paredes que evidenciaban una plaga activa. La situación fue calificada por las autoridades como un riesgo grave e inmediato para la salud pública, lo que llevó a la Consellería de Sanidad a ordenar la suspensión provisional de actividades.
Rechazo judicial mantiene cierre preventivo
En respuesta, Family Cash solicitó una medida cautelar para reabrir el supermercado mientras se resolvía el conflicto legal, alegando pérdidas económicas que superan 30,000 euros por productos perecederos y gastos operativos. Sin embargo, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Lugo, bajo la magistrada Olalla Díaz Sánchez, rechazó admitir esta petición al considerar que no cumplía con los requisitos legales.
El fallo judicial subraya que la suspensión provisional fue apoyada en elementos objetivos sustanciales: presencia activa de roedores vivos, excrementos en múltiples zonas y deficiencias estructurales que facilitan el acceso y proliferación de fauna nociva. Por ello, la jueza determinó que no había base jurídica para levantar la suspensión durante el proceso judicial.
Reapertura tras corregir deficiencias, no orden judicial
El supermercado reabrió este viernes tras una nueva inspección de Sanidad que confirmó la corrección de todas las deficiencias. Sin embargo, el documento judicial deja claro que la reapertura se debe exclusivamente al levantamiento administrativo de la suspensión, no a la decisión del juzgado.
Este incidente destaca la importancia de mantener altos estándares higiénico-sanitarios en establecimientos que manejan alimentos, y refleja la rápida respuesta de las autoridades gallegas para proteger la salud pública. La reapertura pone fin a un cierre que afectó directamente a empleados y clientes, pero Family Cash sigue en proceso de resolver el fondo de la cuestión legal.
¿Qué sigue?
Las autoridades mantendrán vigilancia continua para asegurar que el supermercado cumpla con todos los protocolos sanitarios y evitar un nuevo incidente. Family Cash enfrenta ahora un proceso administrativo y legal que definirá las medidas a largo plazo para evitar riesgos similares.
Para consumidores en México y el mundo, este caso es un recordatorio de que la seguridad alimentaria es monitoreada rigurosamente en Europa y que las autoridades no dudan en actuar con contundencia contra riesgos de salud pública.
“La detección de una plaga activa y condiciones que podían generar riesgo grave justificaron plenamente la intervención”, afirma la jueza Olalla Díaz Sánchez.
Esta noticia sigue desarrollándose y estará en el radar de consumidores que exigen condiciones óptimas en supermercados, tanto en Europa como en México.