La tormenta Gabrielle se desplaza por el Atlántico y se prevé que alcance la categoría de huracán durante el 21 de septiembre, según información del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). A pesar de su potencial intensificación, la amenaza directa para México es mínima.
Las autoridades meteorológicas indicaron que Gabrielle no representa un riesgo para el territorio mexicano, ya que su trayectoria se mantiene alejada de las costas nacionales. Estados como Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Tabasco y Veracruz no experimentarán efectos directos de este fenómeno, aunque se aconseja a la población estar atenta a los avisos oficiales debido a posibles cambios en su trayectoria.
Se estima que Gabrielle podría intensificarse a huracán de categoría 1 durante la madrugada del domingo 21, manteniendo esta fuerza hasta el lunes 22, cuando podría comenzar a debilitarse. Los vientos podrían superar los 120 km/h, lo que generaría marejadas peligrosas y un alto riesgo de corrientes de resaca en áreas como las Bermudas, la costa este de Estados Unidos y la costa atlántica de Cánada a principios de la próxima semana.
La tormenta ha mostrado un progreso constante en su evolución. Desde su formación el 17 de septiembre, cuando se localizó a cerca de 3,990 kilómetros de Cancún, ha ido aumentando su fuerza. El 20 de septiembre, los vientos alcanzaron entre 100 y 120 km/h, situándola a 2,940 kilómetros al este-noreste de Quintana Roo. Se espera que el 21 de septiembre alcance vientos entre 120 y 150 km/h.
Es importante recordar que la temporada de huracanes en México concluye el 30 de noviembre, lo que significa que aún hay tiempo para que se presenten otros fenómenos. A pesar de que Gabrielle no representa una amenaza inmediata, es crucial mantenerse informado a través de fuentes oficiales como el SMN y el Centro Nacional de Huracanes.
La población en las zonas cercanas al Caribe mexicano debe estar alerta ante posibles cambios en la trayectoria de Gabrielle o efectos indirectos que puedan afectar el oleaje.