ACTUALIZACIÓN URGENTE: Tres ciudadanos venezolanos han iniciado una huelga de hambre frente a la Corte Penal Internacional (CPI) en La Haya, Países Bajos, exigiendo que se acelere la investigación sobre los crímenes de lesa humanidad del régimen de Nicolás Maduro desde 2014. Los manifestantes, Mario José de Nigris León, Jhon Manuel Cáceres Morillo y Laura Angélica García Contreras, han declarado: “Lo hacemos por las víctimas de persecución, torturas, encarcelamientos y asesinatos en Venezuela”.
Este acto de protesta ocurre en un momento crítico, ya que la CPI enfrenta una crisis de confianza tras la separación del fiscal jefe, Karim Khan, de la investigación sobre Venezuela. La CPI ha documentado hasta ahora 8,900 víctimas individuales desde que se abrió el caso en 2018. La oposición política también está presionando por avances concretos, destacando la inacción de la Fiscalía.
En noviembre de 2021, la CPI formalizó la investigación por crímenes de lesa humanidad en Venezuela, pero hasta ahora no se han emitido órdenes de captura contra altos funcionarios del chavismo. La situación ha llevado a los activistas a exigir que el tribunal actúe de inmediato, señalando que “no puede seguir la justicia esperando”.
La Fundación Arcadia ha calificado la separación de Khan como una “victoria histórica” y ha pedido acciones correctivas inmediatas, citando preocupaciones sobre la independencia y transparencia de la Fiscalía. La decisión de apartar a Khan se debió a un posible conflicto de intereses relacionado con su cuñada, quien defiende al gobierno venezolano ante la CPI.
Mientras tanto, la responsabilidad del caso ha recaído en el fiscal adjunto Mame Mandiaye Niang, quien asumirá la dirección de la investigación en ausencia de Khan. La CPI es la única corte internacional que actualmente investiga crímenes en América Latina, y la presión sobre el tribunal se intensifica a medida que las víctimas y sus familias claman por justicia.
Las denuncias contra el régimen de Maduro incluyen detenciones arbitrarias, torturas y ejecuciones extrajudiciales, lo que ha generado un llamado global a la justicia. La situación continúa desarrollándose y se espera que la respuesta de la CPI a las demandas de los venezolanos sea observada de cerca por la comunidad internacional.