Los últimos reportes confirman que las negociaciones entre el Gobierno argentino y el Tesoro norteamericano avanzan para un posible préstamo que podría salvar al presidente Javier Milei en su peor crisis económica hasta la fecha. Este rescate financiero, similar al apoyo recibido en abril, llega justo en un momento donde el riesgo país superó los 1400 puntos y las reservas del Banco Central se desangran para contener la presión sobre el dólar.
Crisis económica profunda y desgaste político
La situación es crítica. El jueves, el riesgo país escaló hasta los 1400 puntos, el Banco Central perdió cerca de 400 millones de dólares en reservas y el dólar rompió el techo de la banda cambiaria oficial. Frente a este escenario, Luis Caputo, ministro de Economía, apareció en el programa “Las tres anclas” para asegurar que su plan económico es consistente y anunciar una posible ayuda financiera desde Estados Unidos.
Sin embargo, esta declaración contrasta con la realidad que refleja profunda desconfianza social y política. El rechazo masivo en las urnas el pasado 7 de septiembre en Buenos Aires expuso el malestar generalizado con el programa económico. Además, se evidenció un aumento exponencial en la demanda de divisas y la rápida caída de los bonos argentinos a categoría de “bonos basura” intensificando una posible crisis sistémica sin precedentes.
El rol decisivo de Trump y un crédito que podría cambiarlo todo
Entre las claves que mantiene en vilo al Gobierno se encuentra un posible encuentro bilateral entre Javier Milei y el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Esto genera expectativa sobre un nuevo crédito salvador. De concretarse, este préstamo podría retrasar la caída del Gobierno y ofrecerle un respiro antes de las próximas elecciones, aunque desataría un intenso debate sobre el endeudamiento para financiar campañas políticas.
Al igual que en 2018 con Mauricio Macri, cuando Trump también facilitó asistencia financiera, y en abril con el propio Milei, este tipo de créditos son excepcionales y no siguen los canales habituales de financiamiento internacional.
Impactos inmediatos y riesgos latentes
Mientras el Gobierno anuncia medidas para limitar la compra de dólares a los sectores más ricos y afirma que está dispuesto a vender sus reservas hasta el último dólar, los economistas y expertos independientes alertan que sin esta ayuda financiera la tensión será insostenible. El viernes, Federico Furiase reiteró que no hay suficiente peso en circulación para evitar la caída libre de reservas y culpó al kirchnerismo de incrementar el riesgo país, sin resolver por qué entonces se necesita más deuda.
Por su parte, un grupo amplio de economistas críticos, incluidos algunos que antes apoyaban a Milei, denuncian la mala praxis económica que agrava la recesión y el regreso acelerado de la inflación, dejando al país en manos de decisiones cuestionadas y estrategias que no convencen a los inversionistas ni a la sociedad.
¿Lección aprendida o solo un nuevo ciclo de deuda?
El gran interrogante que plantea esta situación es si el nuevo crédito será una oportunidad para corregir errores o si solo profundizará un patrón de endeudamiento que ha marcado las últimas gestiones. El préstamo otorgado en abril generó festejos, pero la crisis actual podría demostrar que no se aprendió ninguna lección.
Sin apoyo del Tesoro estadounidense, el riesgo de desplome económico y político es inminente. Si Trump decide nuevamente rescatar a Milei, este ganará tiempo, pero a costa de aumentar una deuda que según expertos no garantiza estabilidad a largo plazo para Argentina.
Para México y sus lectores, la evolución de este rescate es clave, ya que cualquier repercusión en la estabilidad económica argentina puede afectar la región y los mercados latinoamericanos, consolidando la importancia de un escenario financiero mundial interconectado y vulnerable ante crisis políticas y económicas.
La próxima semana será decisiva para definir si el Gobierno de Milei logra sostenerse o si su caída será inevitable, mientras el país espera con incertidumbre el anuncio oficial sobre el tamaño y condiciones del crédito esperado del Tesoro norteamericano.
