El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, descartó la posibilidad de una cumbre tripartita con Donald Trump y Vladimir Putin debido a la falta de interés por parte de Rusia. En el transcurso de su visita a Bruselas, Zelensky enfatizó que no existen indicios de que se celebre este encuentro, crucial en medio de las tensiones actuales por las garantías de seguridad.
Durante una reunión por videoconferencia con aliados de Kiev, entre los que se encontraban Emmanuel Macron, Keir Starmer y Friedrich Merz, el mandatario ucraniano subrayó que las garantías de seguridad que ha ofrecido Trump son prioritarias sobre las declaraciones de Putin. A su juicio, las promesas del presidente estadounidense representan una protección más confiable para Ucrania que lo que pueda ofrecer el líder ruso.
Reuniones y estrategias de seguridad
Zelensky también se dirigirá a Washington para reunirse con Trump y líderes europeos, donde espera discutir en detalle la situación de seguridad en su país. A pesar de su interés en conocer los detalles de una reunión reciente entre Trump y Putin en Alaska, admitió no tener información al respecto y solicitó que el presidente estadounidense comparta los resultados de ese encuentro.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, apoyó la propuesta de seguridad que se basa en la OTAN y reafirmó la necesidad de que Ucrania mantenga su integridad territorial. Von der Leyen expresó su deseo de que la cumbre tripartita se lleve a cabo “lo antes posible”, resaltando la urgencia de establecer un frente unido ante las amenazas de Rusia.
Coordinación con líderes europeos
Como parte de su gira, Zelensky llegó a Berlín este miércoles para coordinar estrategias sobre la guerra en Ucrania y próximos encuentros internacionales. Su visita tiene como objetivo consolidar el apoyo de los aliados europeos ante un panorama que se vuelve cada vez más complejo y peligroso. La unión de fuerzas entre Ucrania y sus aliados es vital para enfrentar los desafíos que presenta la agresión rusa.
En resumen, la situación actual refleja un momento crítico en el que la diplomacia y la cooperación internacional son esenciales para garantizar la seguridad y estabilidad en Europa del Este.
