Una tragedia sacudió el mundo del paracaidismo en el Reino Unido cuando Jade Damarell, de 32 años, perdió la vida tras un salto desde un avión el 27 de abril de 2023. La mujer, quien había roto con su novio Ben horas antes, falleció instantáneamente al caer al suelo en Peterlee, Condado de Durham, sin que se abriera su paracaídas. Las autoridades, tras una investigación, determinaron que el suceso podría haber sido un acto deliberado.
El forense, Dr. Leslie Hamilton, dictaminó que la muerte de Jade fue un suicidio, respaldando esta conclusión con el hallazgo de notas que la joven dejó para su familia en la madrugada, justo después de la ruptura. Jade y Ben, quienes compartían una profunda pasión por el paracaidismo, habían estado juntos durante ocho meses, lo que añade un contexto desgarrador a la situación.
Detalles del salto fatal
La mañana de su fatal salto, Bryn Chaffe, copropietario del club Sky-High Skydiving, la vio desayunando con tranquilidad, sin nada que presagiara la tragedia que estaba por ocurrir. Con más de 500 saltos a sus espaldas, Jade era conocida por su valentía y destreza en el paracaidismo, lo que hace que su pérdida sea aún más dolorosa para la comunidad de paracaidistas.
Durante su salto en Wrefords’ Farm, Jade no activó su paracaídas ni el dispositivo de respaldo. Sorprendentemente, también había desactivado el sistema automático de activación, diseñado para abrir el paracaídas en caso de emergencia. Todos sus equipos estaban en perfectas condiciones, lo que descarta cualquier fallo técnico que pudiera haber contribuido a esta tragedia.
Un homenaje a su memoria
A pesar del profundo dolor que enfrenta la familia de Jade, decidieron rendirle homenaje. Agradecieron a la comunidad por su apoyo en estos momentos difíciles, describiendo a Jade como “una persona brillante, valiente y llena de vida, que vivió con pasión y conmovió a todos con su calidez y bondad”. En sus emocionadas palabras, la familia expresó que su hija fue un “espíritu brillante, aventurero y libre”.
El club Sky-High Skydiving organizó un emotivo homenaje que culminó con un último salto en tándem de Liz, la madre de Jade, un gesto simbólico que reflejó el espíritu libre y aventurero que siempre la caracterizó. Este trágico evento deja una profunda huella en la comunidad de paracaidismo, que lamenta la pérdida de una de sus más queridas integrantes.
